ElOtoño sin cuenta atrás

Biennnnnnnn, ha llegado ElOtoño todo junto, la estación que la niña Beatriz no conoce, en cambio yo sí que sé que está aquí. Vamos a sacar calcetines, camisetas de manga larga y básicos otoñales. Adiós a los sudores continuos, porque yo me deshago en sudor y más si estoy en tierras costeras, pero no me importa, porque sudar con pasión es una experiencia extraterrenalmente celestial. Ayer me llovió, seguro que os cayeron algunas gotitas mías evaporadas de sudor de los últimos meses, cuando paseaba de regreso a casa, pensé en ti, en tu pelo H&S sin caspa y en los puntos que había conseguido gracias a la mino en la Vaquita Argentina donde comí un asado de tira muy hecho en tu honor. Y es que es todo un honor saber que ha empezado una nueva cuenta atrás, será este el sentido de la vida, mira que me he planteado miles de veces qué es lo que más me gusta hacer en el mundo, y entre todas las infinitas posibilidades he elegido las cuentas atrás cortitas y perfectas, nada de largos plazos, son paréntesis potenciales cercanos que te hacen vivir en una ilusión perseverante . Normalmente las hago para los cumpleaños más importantes, de 30 días hacia abajo, también bajando escaleras cuando sé el número exacto porque antes he hecho la cuenta adelante, los días que faltan para que llegue Papá Noél (es una cuenta atrás de sólo 10 días, empiezo a hacerla todos los 15 de diciembre), y las pequeñitas pequeñitas, pero no por ello menos buenas, son las que hago en el cine, desde que apagan las luces hasta que empieza la peli, ahí si que disfruto, y vuelvo a ser como una niña, como Beatriz, pero con ElOtoño. Primavera con una esquina rota, de lo mejor que he leído en los últimos meses. 8.