Ir al contenido principal

Destacados

10 cosas de una vida incompleta

¿Os habéis sentido alguna vez como que no tenéis nada completo? Que las cosas están a medias y no sabes cómo hacer para cerrarlas y terminarlas. Quizás es que no se pueda. Pero la sensación es de vacío. Hoy me siento así. Son las dos de la mañana y tres minutos y para paliar este nudo existencial y que me vuelva el sueño voy a hacer una lista chorra sobre cosas que hacen que sientas que tu vida sea incompleta. Ya sabéis, se trata de ese tipo de listado que tanto se llevan y que los medios de comunicación tanto utilizan para conseguir más visitas, objetivo que no es el mío. Si tenéis alguna que añadir,  bienvenida será: 1- No tener una casa propia. 2- No haber escrito nada bueno. 3- No tener un trabajo que te guste. 4- No sentir una vocación por nada en concreto. 5- Ir de puntillas sin hacer ruido. 6- No quejarte lo suficiente. 7- No decir lo que piensas (ésta va muy relacionada con la 6).. 8- No gritar cuando lo necesitas (ahora mismo). 9- No cumplir tus sueños, ni inte

Trueque de Hadas



¿Por qué no hay que creer en los cuentos cuando alcanzas la madurez? No creáis que yo estoy en ese punto de tranquilidad vital, pero como tengo 33 y según un artículo que leí, en los últimos tiempos ha existido un cambio de definición, al igual que ha ocurrido con el pequeño Plutón, y ahora los humanos llegamos a la edad ADULTA (hay que escribirlo en caja alta ya que es de mucha envergadura) a partir de los 30, que desde hace 3 años he tenido que dejar de creer en los cuentos de hadas. MENTIRA. Por fin vi la Joven del Agua, me encantó. Es una película de destila humanidad, bondad, belleza y serenidad con toques de humor que no recordaba desde que hace muchos muchos muchísimos años vi la Princesa Prometida y sentí una emoción hormigueante unida a risas bien hiladas... Lo que me gusta de esta sensación es que sé que sigo creyendo en la fantasía, que un artículo científico te puede decir que dejes de fantasear, pero que la realidad, en este caso sí, supera a la ciencia y que ahora mismo me siento como una ninfa, contando las horas para ver a un príncipe valiente, guapo, simpático y maravilloso. Por mucho que se empeñen los cambios vitales son otra cosa, el ritmo nos lo imponemos nosotros y los trueques más que evolutivos son monetarios... Hay que sobrevivir, por muy ninfa soñadora que me sienta, he vuelto al trueque, mi situación económica es de lo más lamentable, pero gracias a mis cheques restaurante he conseguido unas monedillas, tan sencillo como quedar con tus elfos a cenar, pagar tú con esos maravillosos cheques y que ellos te den su parte en cash, gracias a este sistema en los dos últimos días he conseguido 40 euros, no está nada mal para ayudarme a sufragar mis salidas cinematográficas y de cualquier índole. Un trueque de hadas es como la vida misma, conjunción de ensueño con un toque de existencia terrenal, o lo que es lo mismo, pon los pies sobre la tierra mientras sobrevuelas con tu imaginación por el mundo de la ilusión.
Andromaca, qué mala pata. Besos analgésicos.

Comentarios

Che ha dicho que…
Ays si es que tiene una gracia para decir las cosas! a mi me encantan los cuentos de hadas, creo en las hadas, sueño con ellas, las busco... y a veces, muy pocas muy pocas veces... las encuentro...
Es relativamente fácil saber cuando estas frente a una, por ejemplo su risa interminable y contagiosa, su ojos de niña inocente enormes, sus ganas de jugar, sus abrazos transparentes...
55 horas...

Por cierto, si hablamos de cuentos, prefiero "La Educación de las Hadas", a La Joven del Agua le falta poesía y algo de sentido.
Anónimo ha dicho que…
En la forma del hada encontramos nuestro fondo. Algo imaginario pero... real; real porque nos concede, aunque sea por unos segundos, un momento de sueño, de imaginación y, al fin, de felicidad.
Anónimo ha dicho que…
A mí lo que me mola es la expresión mala pata+besos analgésicos.
Pero me pienso chivar al Jesusito de lo que haces en las horas de curro.
Es que soy una malosa.

Entradas populares